En nuestro poder para marcar la diferencia, no basta con alzar la voz y exigir justicia para los animales abandonados y maltratados, que pasan sus días sufriendo ante los ojos de criaturas crueles e insensibles.

Son acciones reales llenas de compasión y amor las que marcan una gran diferencia no sólo en las vidas de los animales más vulnerables, sino también en la sociedad.

Visiblemente enferma y asustada, pidió ayuda.

Afortunadamente, hay muchas personas que se comprometen en cuerpo y alma a realizar este tipo de actividades. Gracias a organizaciones y grupos de rescate interesados en el cuidado de los animales, la vida de muchos peleteros abandonados ha mejorado.

Una de estas organizaciones es la oscura Animal Rescue, que constantemente sale a la calle para salvar la mayor cantidad de cachorros posible.

El voluntario del refugio era el dueño de este cachorro.

Recientemente fue rescatada una pequeña perrita que se escondía debajo de un banco lleno de escombros, empapada en barro y muy asustada, necesitaba ayuda; de lo contrario no podría vivir sola.

La casa de Rescate Animal llegó al lugar luego de que varios individuos publicaran en redes sociales sobre la situación del perro; muchos comentaron, pero ninguno se acercó para brindar la atención tan necesaria.

Le quitaron cientos de garrapatas de su cuerpo.

No fue hasta que un voluntario del refugio acudió en ayuda de la perra que su terrible destino empezó a cambiar.

La señora la cubrió con una manta, la tomó en sus manos, la subió al auto y la llevó al veterinario.

El médico informó que el estado de salud de la cachorra era frágil, estaba infectada con una garrapata que le provocaba una enfermedad en la sangre, también tenía una infección en los ojos y presentaba un grave bajo peso.

Estaba desnutrida y débil, incapaz de valerse por sí misma, la anemia y la pérdida de sangre parasitaria hicieron que su diagnóstico fuera un poco alarmante.

Su recuperación se retrasa pero creemos que estará bien.

Al concluir la revisión finalmente logró comer, quizás fue su primera comida del día, al menos pudo digerir y asimilar los alimentos.

Su estado de salud es todavía muy delicado. Los veterinarios y cuidadores estuvieron todo el día con ella intentando todo lo posible para que se recuperara.

No se sabe cuánto tiempo tomará para que esta pequeña bola de pelo esté completamente sana, a pesar de que está en buenas manos sigue luchando por su vida.

Este cachorro indefenso necesita una segunda oportunidad, alábalo en tus oraciones y no olvides realizar acciones que marquen la diferencia.

La ayuda es posible si dejamos de lado la indiferencia. Si no puedes adoptar, ayuda a las agencias de rescate y refugios de tu localidad. Juntos somos fuertes. ¡Participar!